La nicotina y sus efectos: ¿Es mala para ti?

El dicho «no hay rosa sin espinas» puede utilizarse para describir los efectos de fumar. Al ser una actividad recreativa muy extendida, fumar suele asociarse a sentimientos o sensaciones positivas como el placer, la felicidad y la relajación. Al mismo tiempo, sin embargo, también plantea diversos peligros, como llevar a la adicción y provocar graves consecuencias para la salud.

La nicotina, como el compuesto más potente de los cigarrillos, siempre ha sido objeto de controversia, suscitando debates sobre sus efectos en el cuerpo humano. ¿Qué efectos tiene la nicotina en el organismo? ¿Es mala para la salud?

En este artículo se habla de la nicotina, de cómo afecta negativamente al cuerpo humano y del principal responsable de los efectos nocivos del tabaco. También se analizan los posibles beneficios de la nicotina para la salud.

Nicotina: el compuesto más típico de los cigarrillos y los productos del tabaco

La nicotina es un estimulante altamente adictivo que se encuentra de forma natural en las plantas de tabaco. También está presente en patatas, tomates, berenjenas y plantas de pimiento verde, pero la cantidad es mucho menor que la de las plantas de tabaco. La nicotina también puede sintetizarse en un laboratorio. Principalmente, se utiliza para producir cigarrillos, cigarrillos electrónicos, productos de tabaco calentado y otros productos del tabaco.

Como todos sabemos, consumir cualquier tipo de producto del tabaco, especialmente fumar, causa graves problemas de salud. Se sabe que fumar está relacionado con el cáncer de pulmón, la EPOC, las cardiopatías, la diabetes, los accidentes cerebrovasculares y muchas otras afecciones.

El tabaquismo es también la principal causa de muertes evitables. Según las estadísticas de la OMS, el tabaquismo mata a más de 8 millones de personas cada año, de las cuales se calcula que 1,3 millones de muertes se deben a la exposición al humo ajeno.

La nicotina, como componente más típico de los cigarrillos y otros productos del tabaco, suele ser el más condenado en lo que se refiere a los riesgos del consumo de tabaco para la salud.

Entonces, ¿es la nicotina la causa principal de las enfermedades y muertes relacionadas con el tabaquismo? Antes de analizar esto, veamos qué efectos negativos produce la nicotina en el cuerpo humano.

¿Qué efectos negativos tiene la nicotina en el cuerpo humano?

Se sabe que la nicotina provoca diversos efectos negativos en el cuerpo humano. Algunos de ellos son los siguientes.

Adicción

No es ningún secreto que la nicotina es la principal razón por la que la gente fuma o consume cualquier forma de productos del tabaco debido a su naturaleza adictiva.

Entonces, ¿cómo consigue la nicotina que la gente se vuelva adicta? Tomemos como ejemplo el tabaquismo, la forma más común de consumo de nicotina. Al fumar, se inhala nicotina en los pulmones, que se absorbe en el torrente sanguíneo y viaja al cerebro en cuestión de segundos.

La nicotina se une entonces a los receptores nicotínicos-colinérgicos del cerebro y provoca una respuesta biológica, impulsando la liberación de dopamina, también conocida como la hormona del «sentirse bien», un neurotransmisor que forma parte del sistema de recompensa del cerebro y regula la sensación de placer y bienestar.

La sensación placentera suele denominarse «subidón de nicotina». Pero el problema es que la nicotina desaparece rápidamente. En palabras del Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas (NIDA), la nicotina produce una «sensación temporal de bienestar y relajación».

Como resultado, la liberación de dopamina refuerza el hábito de fumar, porque cuando la sensación anterior se desvanece, el cerebro busca otro placer, es decir, otra dosis de nicotina, lo que conduce a un ciclo de tabaquismo continuo. A medida que este ciclo continúe, la persona se volverá dependiente de la nicotina, lo que también se denomina adicción a la nicotina.

Además, el consumo prolongado de nicotina produce tolerancia, lo que significa que es necesario tomar una dosis mayor de nicotina para disfrutar del mismo efecto placentero. Así es como se pasa gradualmente de ser un fumador ligero a un fumador empedernido.

Dejar de fumar de repente altera el equilibrio químico del cerebro y provoca efectos secundarios físicos y psicológicos. Lo más difícil es el ansia de nicotina, que puede ser abrumadora y constituye el principal obstáculo para dejar de fumar.

Además, otros síntomas graves de abstinencia se suman a la dificultad de dejar de fumar, como ansiedad, irritabilidad, fatiga, dificultad para concentrarse, problemas para dormir, dolor de cabeza, estreñimiento, etc.

En una palabra, todos estos efectos secundarios (entre otros factores) hacen que fumar sea uno de los hábitos más difíciles de abandonar.

Aparte de la elevada adicción, la nicotina tiene más efectos negativos en el cuerpo humano.

Daños para el cerebro en desarrollo

Se sabe que la nicotina es perjudicial para el cerebro en desarrollo. Una de las razones es que la exposición a la nicotina entre los jóvenes afectará a la formación de los circuitos cerebrales que desempeñan un papel en el aprendizaje, la atención y la susceptibilidad a la adicción, haciéndolos más vulnerables a la adicción a la nicotina. Los estudios han demostrado que fumar a una edad temprana puede conducir al consumo diario y a la dependencia de la nicotina durante toda la vida.

Daños para las mujeres embarazadas

La exposición a la nicotina durante el embarazo puede provocar algunos efectos negativos en la mujer embarazada y su feto. Estos efectos incluyen un mayor riesgo de pérdida del embarazo, parto prematuro y mortinato, bajo peso al nacer y embarazo ectópico, etc. Además, la exposición a la nicotina durante el embarazo también puede causar problemas de salud a largo plazo para el niño, como infecciones respiratorias y asma.

Otros efectos secundarios de la nicotina

Otros efectos secundarios de la nicotina son los latidos acelerados del corazón, la hipertensión, los mareos, la diarrea, el dolor de estómago, las náuseas, la sequedad de boca, los temblores y el ardor de estómago, por nombrar sólo algunos.

Aunque la nicotina es muy adictiva y nociva para el cuerpo humano, la mayoría de los riesgos para la salud que conlleva fumar se deben a otros compuestos. La nicotina no se considera la principal culpable de las enfermedades y muertes relacionadas con el hábito de fumar. Entonces, ¿cuál es el asesino que se esconde tras el hecho de fumar?

 

Las causas fundamentales de los riesgos para la salud relacionados con fumar.

Está bien establecido que los riesgos para la salud derivados del tabaquismo proceden principalmente de la combustión de los cigarrillos. Cuando un cigarrillo se enciende, libera diversas sustancias químicas tóxicas que son inhaladas por los fumadores y las personas de su entorno.

Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, se han encontrado más de 7.000 componentes químicos en el humo de los cigarrillos, cientos de los cuales son perjudiciales para la salud humana.

Alrededor de 70 de estos productos químicos tóxicos se identifican como carcinógenos, entre los que se incluyen: benceno, formaldehído y acetaldehído, arsénico, acroleína, nitrosaminas específicas del tabaco (TSNAS), etc.

Estas toxinas y carcinógenos son las causas fundamentales de toda una serie de enfermedades y muertes relacionadas con el tabaquismo. En otras palabras, es el humo tóxico del cigarrillo, y no la nicotina, el responsable directo de los efectos extremadamente nocivos del tabaquismo.

No es el fin. De forma tremendamente inesperada, resulta que la nicotina incluso puede ofrecer algunos beneficios para la salud.

¿Cuáles son los beneficios potenciales de la nicotina para la salud humana?

Se ha informado de que la nicotina tiene algunos beneficios para la salud, como el aumento del estado de alerta y la reducción de la ansiedad. Por ejemplo, un estudio realizado por Neal. L Benowitz en 1988 demostró que la nicotina puede «aumentar la sensación de bienestar, producir excitación o relajación, ayudar a mantener la vigilancia y reducir la ansiedad».

La ciencia médica que hay detrás de estos efectos puede ser un poco compleja. Pongamos un ejemplo sencillo. Cuando la nicotina entra en el organismo, provoca que la glándula suprarrenal libere adrenalina, un neurotransmisor que prepara al cuerpo para la respuesta de «huida o lucha», también conocida como respuesta de estrés agudo. De esta forma, la nicotina puede mejorar temporalmente el estado de alerta, la concentración y la memoria. En este caso, la nicotina actúa como «agonista».

Curiosamente, además de ser un estimulante, la nicotina también puede actuar como sedante, dependiendo de la dosis que se ingiera. Cuando la nicotina llega al cerebro, también puede potenciar la liberación de beta-endorfina, una sustancia química implicada en el control del dolor, el alivio del estrés y la mejora del estado de ánimo. Así pues, la nicotina también se utiliza como fármaco ansiolítico, que ayuda a reducir la ansiedad y a aliviar el estado de ánimo.

El efecto combinado de la nicotina puede ser parte de las razones por las que fumar no sólo es para muchos fumadores una forma de ganar vitalidad cuando se sienten cansados o agotados, sino una fuente de consuelo en momentos de estrés.

La cosa no acaba ahí. Hay más estudios interesantes sobre los posibles beneficios de la nicotina para la salud. Por ejemplo, los investigadores han sugerido que la nicotina puede mejorar la función cognitiva y proteger contra enfermedades como el Alzheimer y el Parkinson.

Entonces, ¿cómo ayuda la nicotina al Parkinson? Una prueba científica demuestra que la nicotina puede suprimir la sobreexpresión de SIRT6. La SIRT6 es una proteína reguladora de la cromatina conocida por su capacidad para inhibir el envejecimiento de las células, los tejidos, los órganos y el cuerpo. Sin embargo, las investigaciones demuestran que la ambulancia de SIRT6 es un factor de riesgo que contribuye al Parkinson. La nicotina entra en juego para ofrecer neuroprotección al acelerar la degradación de SIRT6, ayudando así a ralentizar la progresión de la enfermedad de Parkinson.

Las investigaciones también han encontrado algunos vínculos entre la nicotina y la enfermedad de Alzheimer. Para comprender el mecanismo, primero debemos entender la sustancia química «acetilcolina», que es un neurotransmisor que gobierna el aprendizaje, la retención de la memoria y la atención. Las investigaciones han demostrado que la disminución de la producción de acetilcolina es en parte responsable de la enfermedad de Alzheimer.

Cuando la nicotina se une a los receptores de acetilcolina, ralentiza o bloquea la enzima que degrada la acetilcolina, de modo que puede mantener o aumentar sus niveles. Esto forma parte de la ciencia que subyace a los beneficios de la nicotina para la salud en la enfermedad de Alzheimer.

Además, las investigaciones demuestran que la nicotina puede prevenir potencialmente la formación de «cúmulos de proteína beta-amiloide». Los niveles anormales de estos cúmulos proteínicos están relacionados con la formación de placas que alteran directamente la función celular en los enfermos de Alzheimer.

Aunque cada vez son más los estudios que demuestran que la nicotina tiene beneficios positivos para la salud, todavía no hay investigaciones concluyentes y se necesitan más pruebas y hechos científicos para determinar con mayor precisión sus ventajas.

Conclusión

Entonces, ¿la nicotina es mala para ti? La respuesta será «sí». El problema más grave de la nicotina es su naturaleza adictiva, que puede prolongar su exposición a los riesgos para la salud del tabaco. Además, la nicotina también puede tener diversos efectos secundarios en el cuerpo humano.

Sin embargo, a pesar de todos sus efectos negativos, la nicotina no se considera la causa directa de las enfermedades y muertes relacionadas con el tabaquismo. En cambio, los efectos nocivos del tabaco proceden principalmente del humo tóxico de los cigarrillos.

Y lo que es más interesante, los estudios han demostrado sistemáticamente sus posibilidades para mejorar la cognición, ralentizar el Alzheimer y retrasar el avance de la enfermedad de Parkinson. Aunque aún no se han realizado investigaciones concluyentes, los resultados son alentadores.

Sin embargo, es importante recordar que esto no significa que se anime a fumar para obtener estos beneficios potenciales para la salud, ya que aquí estamos hablando de la nicotina por sí sola, no de fumar.

Al contrario, fumar aumenta el riesgo de desarrollar estas enfermedades, ya que perjudica a todas las partes del cuerpo humano, incluido el cerebro. Por ejemplo, un estudio realizado por investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington en San Luis sugiere que fumar reduce el tamaño del cerebro y provoca su envejecimiento prematuro.

En definitiva, la mejor opción que puede tomar es mantenerse alejado del tabaco y de sus efectos nocivos.